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domingo, 11 de noviembre de 2018

¿Permanece igual el encanto de Miami Beach para el turismo y comercio?

Mientras conocemos su opinión a la propuesta en el título, le adelantamos una parte de la información sobre este tema que ofrece miamidiario.com.

La publicación anota como, nostálgicamente, Ricky Arriola recuerda la Miami Beach de los años 1990 en los tonos de luces de neón y pasteles de Miami Vice. 

El comisionado de Miami Beach narra como por esa época los turistas compartían las aceras con modelos europeos y titanes de la moda. La vida nocturna era tal que Mickey Rourke, Prince y Ron Wood, guitarrista de los Rolling Stones, abrieron clubes.

Pero, advierten, "eso se acabó. Los modelos y la industria de la moda desaparecieron, alejados por el aumento de los alquileres y permisos mucho más estrictos. Muchos clubes se han ido al otro lado del puente. Solamente las marcas más conocidas, como Nike y Apple pueden darse el lujo de alquilar locales en Lincoln Road. Ocean Drive se ha convertido en un lugar de turistas alborotados que no atrae mucho a la gente del lugar."

“Llevamos mucho tiempo dormidos en los laureles”, explica Arriola. “Miren esto. ¿Qué tienda respetable quiere estar entre dos negocios de este tipo?”

En Miami Beach hay 117 tiendas cerradas en este momento, según un conteo solicitado recientemente por Arriola. Eso significa 4.5 por ciento de las tiendas de la ciudad. Según información compilada por la firma de arriendo de locales comerciales Marcus & Millichap, el único distrito comercial de Miami-Dade con más tiendas sin inquilino es Coconut Grove, que está en medio de un programa de rejuvenecimiento. Después de La Playa, el área con más tiendas vacías es el noroeste de Miami-Dade.

Pero el problema es mucho más que las tiendas vacías. Los locales vacíos son síntoma de problemas más endémicos, dice Drew Kristol, vicepresidente de Marcus & Millichap.

Por una parte, el espacio comercial en La Playa es tan caro como siempre, pero la demanda no es lo suficiente como para justificar los altos precios.

“En cierto momento yo estaba comprando propiedades en South Collins por un máximo de $ 1,800 por pie cuadrado de espacio para grandes clientes”, dijo Kristol. “Ahora sólo pago $ 700 porque los minoristas no pueden atraer suficientes clientes para justificar otra cifra”.

O, como lo ven Arriola y otros: Miami Beach ha perdido su encanto. Los turistas siguen viniendo a la playa, con frecuencia, pero se van a fiestear y a cenar a otra parte. El índice de ocupación hotelera en Miami Beach ha estado por debajo del resto de Miami-Dade todos los años desde el 2012, según cifras de la firma de análisis STR.

Esa estrella poderosa que llevó a LeBron a decir en el 2012 en la televisión nacional que iba a llevar su talento a South Beach (aunque jugaba y vivía en tierra firme) se ha ido apagando en momentos que vecindarios como Wynwood, Brickell y el Design District han desarrollado su propia magia.

Y el fuerte tráfico y el cierre parcial del Viaducto MacArthur tampoco ayudan. Lo mismo sucede con la perspectiva del aumento del nivel del mar.

El turismo acude a la playa, pero luego se retira a disfrutar en otros lugares, de comida y bebida.

“Yo lloro por mi ciudad”, dijo Nancy Liebman, ex comisionada de Miami Beach y preservacionista urbana de larga data.

Si desea dar información adicional u opinar sobre esta situación, lea primero el artículo completo donde se ofrece más información.

Con información de miamidiario.com y El Nuevo Herald.